Esta tarta la hice este verano con mucho cariño porque era para mi abuela. Mi abuela se llama Rosa aunque sus nietos la llamamos Mamá Rosa, como ella quiere que hagamos. Además de como es obvio su nombre es rosa, a ella le encantan las rosas, por lo que le hice una tarta de rosas de varios tamaños y colores. Le gustó mucho y se ha guardado las rosas de recuerdo y alguna hojita.
La tarta era de zanahoria con manzana y nueces, y su relleno de crema de quesos. La llevé a su fiesta de cumpleaños, en la que nos reunimos casi toda la familia y hacemos una merienda cena. Son reuniones entrañables, porque estamos al aire libre, poniéndonos todos al día, los primos correteando y jugando ¡y poniéndonos las botas! Mi abuela se queda encantada de todos que vamos a verla y estamos allí por ella.
Las rosas están hechas pétalo a pétalo con pasta de goma para poder hacerlas así de finitas, con tonos suaves y pintadas con colorante alimenticio en polvo para darle volumen y detalles delicados.
Pues esta es ¡La Tarta de Rosas de mi Abuela! ¡Hice muchas fotos!
La tarta era de zanahoria con manzana y nueces, y su relleno de crema de quesos. La llevé a su fiesta de cumpleaños, en la que nos reunimos casi toda la familia y hacemos una merienda cena. Son reuniones entrañables, porque estamos al aire libre, poniéndonos todos al día, los primos correteando y jugando ¡y poniéndonos las botas! Mi abuela se queda encantada de todos que vamos a verla y estamos allí por ella.
Las rosas están hechas pétalo a pétalo con pasta de goma para poder hacerlas así de finitas, con tonos suaves y pintadas con colorante alimenticio en polvo para darle volumen y detalles delicados.
Pues esta es ¡La Tarta de Rosas de mi Abuela! ¡Hice muchas fotos!











